¿Y si hubiésemos saboreado más los atardeceres?
¿Y si no nos hubiésemos preocupado tanto por nuestra apariencia pero si por nuestro alrededor?
Ya no hay vuelta atrás, el juego va a terminar.
No intentes correr, de nada sirve ya.
Las cosas no se dejan para lo último,
no es momento de escapar.
No te preocupes ahora,
no es momento de pensar.
Talvés esto no tendría que suceder
sentirte culpable no va a ayudar en nada
pero reconocerlo no está mal.
Admítelo, te lo veías venir
pensabas que lo podías solucionar,
el juego se le fue de las manos
a esta humanidad.
Creerte esta hermandad fue lo peor que te podía pasar
¡DESPIERTA! ¡NADA ES REAL!
Este es el final.
Gracias por esconder la verdad.
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